La felicidad es generalmente la meta de todo hombre que vive en este mundo. De sobra somos conocedores del hecho de que la felicidad absoluta no existe o es una utopía, pero sí es verdad que lo que vamos pretendiendo es el optar a un mayor número de momentos de felicidad.
A veces tendemos a confundir la felicidad con las juergas o las marchas que nos pegamos, algo realmente absurdo, pues pensar que la felicidad es eso, un rato de juerga con los amigos, es como pensar que un charco de agua es el océano o pensar que ese charco es una parte importante de ese océano.
¿Cómo se consigue la felicidad a través de los ideales?. Sencillamente la felicidad se consigue con la fe. Cuando se tiene fe en Jesús se es feliz por naturaleza, no una fe de decir “Bueno, sí, yo creo en algo…”, sino más bien una fe asentada en la base de nuestro corazón, una fe capaz de asegurar con certeza de que Dios existe y que además está en tu vida bien reflejado, cuando sabes que Jesús está contigo nada temes, nadie ni nada puede hacerte daño porque Él está contigo, esa es la fe a la que me refiero. La persona que cree firmemente que Jesús existe, esa persona, es feliz. Disfruta de muchos momentos de felicidad y esa felicidad no tiene nada que ver con las juergas ni los cachondeos, esos momentos de felicidad vienen definidos por muchas cosas que antes se hacían y que, o bien creías que eran tonterías o bien como nunca antes lo habías visto desde otro ángulo ahora parecen diferentes. Jesús no impone nada, todos lo sabemos, Jesús propone una libertad y un sentimiento de seguridad que sólo pueden experimentar aquellas personas que con fe pueden decir “Estoy seguro de que Dios existe, está en mi vida y yo le noto a mi lado en todo momento”.
8 Define la felicidad.
8 Analiza la consecución de la felicidad a través de la fe.
8 Qué tipo de felicidad es la que se consigue.
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